Following, is an interview conducted by the Valladolid International Film Festival, also known as Seminci or Semana Internacional de Cine de Valladolid.
La directora islandesa presenta Últrás Reykjavík (Revolución Reikiavik), el drama de una mujer empleada en un banco que pierde su empleo debido a la crisis. Un cortometraje que se proyectará dentro de la Sección Oficial del festival el día 21 de octubre en el Teatro Calderón.
La protagonista principal se avergüenza de su situación, ¿es un reflejo de la sociedad europea?
El orgullo es una característica que tiene la mayoría de la gente, si bien es cierto que algunos más que otros. A los europeos, como a cualquier persona del mundo, les gustaría ser vistos como independientes y con éxito y por lo tanto, cuando vienen malos tiempos algunas personas eligen minimizar sus efectos en un intento por conservar su orgullo.
¿Sería la misma película si tuviera otro trabajo?
Gudfinna, la protagonista, es un personaje que se ha dedicado en cuerpo y alma a su trabajo y al status que cree que esto le aporta. Por eso, cuando falla tanto su empresa como el partido político que apoya su visión de la vida cambia. Sin esto la historia de la película habría cogido una dirección diferente, quizás ella no hubiera trabajado en un banco.
¿Quién es el responsable de la crisis?
Como es de esperar, no todo el mundo estará de acuerdo con el origen de la crisis. En mi opinión, la cosa está clara. En el caso de Islandia, y de cualquier país, es el surgimiento del capitalismo apoyado por nuestros partidos conservadores que tuvieron el poder desde 1991 hasta 2009, que lideraron la desregularización, la privatización de los bancos y, debido a un incomprensiblemente exceso, crearon una burbuja que no podía más que explotar.
Cuando los gobiernos tienen que llevar a cabo recortes siempre afectan a la cultura, ¿cree que el cine también está en crisis?
Estoy orgulloso poder decir que los cineastas islandeses lucharon contra los recortes en el cine provocados por la crisis de 2008. Fueron capaces de demostrar que el arte y la cultura no sólo son importantes socialmente sino también económicamente. Las películas y la música no sólo crean puestos de trabajo y conciencia de país, también atraen a muchos turistas.
¿Qué representa para usted poder participar en la Seminci?
Es un gran honor ser seleccionado para la Seminci, aunque desearía haber podido ir en persona. Espero que el público disfrute con la película y con el programa de este maravilloso festival.
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